La COVID-19 no deja de ser una amenaza directa contra niñas y niñas, principalmente por la crisis económica, de salud y bienestar emocional que ha generado.
Save the Children elaboró una encuesta global a niñas, niños y sus familias para determinar el impacto de la pandemia por la COVID-19. Preguntaron sobre el acceso a la salud, educación, economía familiar y seguridad. La intención era conocer las opiniones de los propios niños y niñas al respecto.
Esta encuesta fue aplicada en todas las regiones del mundo. En el caso de América Latina y el Caribe se realizó en El Salvador, República Dominicana, Colombia, Perú, Brasil, Bolivia y Paraguay.
A pesar del incremento de la violencia, el confinamiento también generó cambios positivos como la normalización de hábitos de higiene y la disminución de enfermedades relacionadas con su mala práctica, también en la relación de las familias con las niñas y niños.
9 de cada 10 adultas y adultos manifestaron cambios parentales positivos durante la pandemia en comparación con la situación previa a la COVID-19; por ejemplo, mostrar más amor o afecto, o estar más receptivo a las necesidades de los niñas y niñas.
EL CASO DE MÉXICO
De acuerdo a datos de la Red por los Derechos de la Infancia (REDIM), durante el año 2020 fallecieron en México a causa de COVID-19, 364 niñas, niños y adolescentes. A pesar de que miles de niñas y niños han perdido a sus familias por causa de la enfermedad, hasta el momento no hay cifras que midan el impacto de la pandemia en el incremento en la orfandad.
Lejos de disminuir, los feminicidios de niñas y adolescentes se han incrementado desde el confinamiento. 86 mujeres de 0 a 17 años fueron víctima de feminicidio tan solo de enero a septiembre de 2020.
Los efectos económicos de la pandemia también generan un impacto negativo en la salud y bienestar de la niñez, al limitar su acceso a alimentación adecuada, servicios de salud e incluso a desarrollar su aprendizaje.
La Encuesta de Seguimiento de los Efectos de COVID-19, reportó que 32.3% de los hogares con niñas y niños tuvieron una reducción en sus ingresos, mientras que 15.2% declaró presentar inseguridad alimentaria.
Save the Children hace un llamado a los gobiernos, los donantes, las organizaciones multilaterales y todas las demás partes interesadas para que sumen esfuerzos y adopten medidas para garantizar que:
La respuesta humanitaria ante la COVID-19 no intensifique la vulnerabilidad de niñas, niños y sus familias, en especial las prácticas discriminatorias y las desigualdades de género.
Los planes de respuesta de COVID-19 destaquen la protección de la niñez y la atención a partir de la identificación y priorización de riesgos y necesidades, bajo una perspectiva de género y respuestas integradas.
Los servicios de protección de la niñez no sean suspendidos y aseguren la capacidad y financiación necesarias para proporcionar servicios esenciales e inclusivos de forma segura, integrando la atención en salud mental y apoyo psicosocial para la niñez.
Las niñas y niños sean escuchados sobre sus vivencias bajo la COVID-19 – a través de mecanismos de retroalimentación e investigación – que incluyan sus sugerencias en el diseño de planes de respuesta.
Los sectores de educación y protección están habilitados para responder ante situaciones de violencia, en especial cuando se trata de población migrante, niñas y adolescentes.
Fuentes: El impacto de la COVID-19 en la protección y bienestar de niños y niñas, Save the Children, 2021 Balance Anual REDIM 2020, en https://issuu.com/infanciacuenta/docs/balance_anual_redim_2020 Encuesta de Seguimiento de los Efectos del COVID-19 en los Hogares Mexicanos #ENCOVID
Efectos de la pandemia en la salud y bienestar de la niñez
La COVID-19 no deja de ser una amenaza directa contra niñas y niñas, principalmente por la crisis económica, de salud y bienestar emocional que ha generado.
Save the Children elaboró una encuesta global a niñas, niños y sus familias para determinar el impacto de la pandemia por la COVID-19. Preguntaron sobre el acceso a la salud, educación, economía familiar y seguridad. La intención era conocer las opiniones de los propios niños y niñas al respecto.
Esta encuesta fue aplicada en todas las regiones del mundo. En el caso de América Latina y el Caribe se realizó en El Salvador, República Dominicana, Colombia, Perú, Brasil, Bolivia y Paraguay.
Te puede interesar: Consecuencias del COVID-19 en la salud mental de niñas y niños
RESULTADOS DE LA ENCUESTA
Dentro de la encuesta, se detectaron varios factores que afectaron el bienestar de la niñez:
VIOLENCIA
En el 8% de los hogares, un miembro de la familia manifestó haber sufrido violencia física o emocional desde el comienzo de la pandemia.
3.5% de las niñas y niños encuestados indicaron que hubo violencia en su hogar.
BIENESTAR EMOCIONAL
1 de cada 2 cuidadoras y cuidadores detectaron signos de angustia en niñas y los niños desde el inicio de la pandemia, además:
Save the Children trabaja todos los días para revertir los efectos de las emergencias en la vida y bienestar de la niñez en México, súmate y forma parte de estas acciones.
CAMBIOS POSITIVOS
A pesar del incremento de la violencia, el confinamiento también generó cambios positivos como la normalización de hábitos de higiene y la disminución de enfermedades relacionadas con su mala práctica, también en la relación de las familias con las niñas y niños.
9 de cada 10 adultas y adultos manifestaron cambios parentales positivos durante la pandemia en comparación con la situación previa a la COVID-19; por ejemplo, mostrar más amor o afecto, o estar más receptivo a las necesidades de los niñas y niñas.
EL CASO DE MÉXICO
De acuerdo a datos de la Red por los Derechos de la Infancia (REDIM), durante el año 2020 fallecieron en México a causa de COVID-19, 364 niñas, niños y adolescentes. A pesar de que miles de niñas y niños han perdido a sus familias por causa de la enfermedad, hasta el momento no hay cifras que midan el impacto de la pandemia en el incremento en la orfandad.
Lejos de disminuir, los feminicidios de niñas y adolescentes se han incrementado desde el confinamiento. 86 mujeres de 0 a 17 años fueron víctima de feminicidio tan solo de enero a septiembre de 2020.
Los efectos económicos de la pandemia también generan un impacto negativo en la salud y bienestar de la niñez, al limitar su acceso a alimentación adecuada, servicios de salud e incluso a desarrollar su aprendizaje.
La Encuesta de Seguimiento de los Efectos de COVID-19, reportó que 32.3% de los hogares con niñas y niños tuvieron una reducción en sus ingresos, mientras que 15.2% declaró presentar inseguridad alimentaria.
Durante la pandemia hemos distribuido despensas, kits de higiene y limpieza, recursos económicos, manuales educativos y para prevenir la violencia en casa. Ayúdanos a continuar nuestra labor.
RECOMENDACIONES DESDE SAVE THE CHILDREN
Save the Children hace un llamado a los gobiernos, los donantes, las organizaciones multilaterales y todas las demás partes interesadas para que sumen esfuerzos y adopten medidas para garantizar que:
Las y los Defensores de la Niñez son personas que se comprometen a brindar su apoyo de forma incondicional, a fin de proteger a la niñez en México. Súmate hoy y forma parte de este activo grupo.
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