Victoria, de 7 años, y sus padres María Fernanda y Jumber, dejaron Venezuela debido a la crisis económica que afectó su calidad de vida, y migraron a Pacasmayo, Perú. Allí, María Fernanda recibió apoyo económico y mentoría de Save the Children para poner en marcha su emprendimiento. Se trata del proyecto «Un camino hacia la integración» que es implementado por Save the Children, con la ayuda de la Oficina de Población, Refugiados y Migraciones (BPRM).

«Decidí salir de Venezuela cuando vi que no había vuelta atrás y no podía darle a mi hija lo que necesitaba en ese momento«.

Migrar y comenzar de nuevo

Durante los primeros meses, Jumber pagó la renta haciendo trabajos de pintura en la casa
de la dueña que les alquilaba una habitación. Por su parte, María Fernanda trabajaba y no podía cuidar a Victoria. Esto la preocupaba, así que decidió montar un negocio de manicure, pedicure y peluquería, lo que le permitiría decidir su propio horario de trabajo y pasar más tiempo con su hija.

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María Fernanda conoció Save the Children a través de una amiga, que también había sido beneficiaria del proyecto anteriormente. Tras rellenar un formulario, recibió una llamada para iniciar el proceso de evaluación, que incluía ayuda en efectivo y una tutoría para hacer crecer su empresa.

Con el apoyo monetario de Save the Children, María Fernanda compró comida, pagó la renta, el recibo de luz y también pudo invertir en algunos materiales que necesitaba para su nuevo negocio.

«Este negocio me ha dado más tranquilidad, porque puedo tener a mi hija aquí conmigo».

Nos cuenta que tiene clientas y amigas venezolanas y peruanas, que es autodidacta, pero que la tutoría brindada por Save the Children la ayudó mucho: «Al principio ofrecía un servicio muy básico, pero ahora puedes pedirme algún diseño exótico y puedo hacerlo. Además con la ayuda recibida, he podido hacer mi espacio más confortable».

María Fernanda nos cuenta que Victoria, su hija la ayuda mientras ella trabaja: «Viene y me ayuda pasándome la paleta y el algodón. Siempre está está observando lo que hago, y tal vez aprenda así, porque así aprendí yo».

Victoria y Pulgoso

Victoria tiene 7 años y vive en Perú desde hace un año. Nos cuenta que no le gustó el viaje hasta Perú y que quiere regresar a Venezuela para estar con sus abuelos:

«No me gustó el viaje a Perú porque dábamos muchas vueltas. Íbamos de un autobús a otro; hacía mucho calor. Atravesamos ríos y senderos. Me gustaría volver a Venezuela para volver a vivir allí, por mis abuelos».

Ella quiere ser veterinaria y tener un refugio para cuidar a los animales. Victoria y su familia tienen un perrito que se llama Pulgoso. «Lo tenemos hace 6 meses y lo quiero mucho».

Además, Victoria está en segundo curso de la escuela y le gustan las matemáticas porque dice que son divertidas. También ha hecho muchas amigas y le gusta hacer educación física.

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En su tiempo libre le encanta ir a la playa donde juega con la arena y come helado. Y también le gusta acompañar a su mamá mientras trabaja. Esto es posible gracias al proyecto «Un camino hacia la integración» que es implementado por Save the Children, con el apoyo de la Oficina de Población, Refugiados y Migraciones.

«Mi madre hace uñas y peinados con trenzas. Me gusta estar con ella y hacerle compañía cuando trabaja porque paso más tiempo con ella. La ayudo pasándole cosas quecosas que olvida, como algodón y limas de uñas».